La infancia es la primera etapa en el desarrollo humano y a lo largo de ella van a tener lugar numerosos cambios y progresos que darán como resultado la formación del futuro adulto, ya sea física como psicológicamente. Es decir los seres humanos nacemos por naturaleza con unas limitaciones, necesidades, capacidades… En definitiva, somos inmaduros y será en el transcurso de la infancia cuando se produzcan las grandes conquistas que llevan al individuo a tener su propia autonomía y a desarrollar sus capacidades, formando parte de sus entorno social.
Todos esos avances serían inalcanzables para el niño sino contara con la ayuda indispensable del adulto, entendiendo que no sólo hay que limitarlo al marco familiar -si bien la familia es fundamental-, también lo son la escuela, el conjunto de la sociedad, sus iguales…Todos tienen que aportar ayuda al niño para que este logre alcanzar sus conquistas y desarrollo.